La Volata

    El surgimiento del Fascismo en Italia supuso un cambio no solo político, sino que abracó la gran mayoría de la sociedad. En este sentido, el Fascismo, como movimiento político-social de masas, aspiraba al control de la nación, cosa que no consiguió en su totalidad y que, sin embargo, sí que lograron la Alemania de Hitler o la URSS de Stalin, por ejemplo. En este sentido, a pesar de no lograr afianzarse como un Estado Totalitario, el Fascismo fue un movimiento político, social, cultural y vanguardista, que rompía con el pasado, con lo viejo, tanto en la política como en la sociedad, el arte, la literatura, la educación… y es aquí donde entra la Volata.

Durante los años 20, los felices 20, se estaba construyendo una sociedad de masas en Italia, que abandonaba la vieja política de partidos tradicionales. Tras la I Guerra Mundial, surge, además, ligado a lo anterior, un intento de reconstrucción nacional y se aboga por lo que 30 años después sería el Estado del Bienestar. En este contexto, entremezclado con la superación, la meritocracia, los valores colectivos (“el hombre ha muerto que diría Mussolini) … se afianza el deporte, que será muy importante para la imagen del país.

En la década de los años 20 se inventa la Volata, un juego de pelota que pretendía sustituir al futbol y al rugby. Había dos equipos de 8 jugadores cada uno y por lo general las reglas del futbol se entremezclaban con las reglas del balonmano. Aunque el futbol era un deporte de masas y muy conocido ya en la década de 1920 no solo en Italia, sino en toda Europa, las autoridades fascistas no lo veían con buenos ojos puesto que lo asociaban a Inglaterra, donde nació.

El deporte era fundamental para atraer a las masas, era un importante instrumento para configurar la sociedad de acuerdo con los cánones ideológicos del fascismo. Sin embargo, el futbol, el rugby o el baloncesto eran considerados deportes extranjeros. Por esta razón, se impulsó la Volata, como deporte nativo y genuinamente italiano. Este deporte nace además con apoyo y financiación estatal, es decir, es el Estado fascista quien lo crea y promueve. Es, concretamente, Augusto Turati, secretario del PNF (1926-1930), quien en 1928 crea la Volata, el deporte mas italiano de los deportes tal y como se leía en la prensa del momento.



Aunque combinaba las normas del futbol, rugby o balonmano, se vendió por la propaganda como un deporte italiano que descendía de siglos pasados, sobre todo, se hacía hincapié en el calcio de Florencia o el Tamburello, deportes que provenían de la Edad Media. Con ello se pretendía dar continuidad al deporte recién creado y combinarlo con la historia y ligarlo al nacionalismo italiano. Como se ha dicho anteriormente, había dos equipos de 8 jugadores cada uno en un campo de césped de 90 x 60 metros. Se trataba de meter el balón en la portería contraria, valiéndose los jugadores de cualquier parte de su cuerpo para mover el balón y también para detener al rival.

Así, en 1929 se creó una liga nacional con 100 equipos. Esta liga contó con gran simpatía y acogida al inicio debido a la propaganda que se hizo por el Estado y las organizaciones deportivas. Sin embargo, los autores coinciden en su simpleza (combinaba el futbol con el rugby en su mayoría), motivo por el cual la Volata no obtuvo más éxito que el que tuvo al inicio. Este escaso éxito se observa ya en 1931 cuando sin ayuda estatal fracasó la Liga Nacional de Volata, manifestándose en hecho patente ya en 1933 cuando se disolvió. El único título de campeón nacional fue a parar al equipo Dopolavoro Richard Ginori de Milán en 1930. Ante la imposibilidad de seguir con el proyecto y la poca acogida que tuvo entre las masas, el fascismo optó por olvidar aquel intento, siendo el futbol o los juegos olímpicos los deportes a tener en cuenta como muestra el palmaré italiano siendo campeona del mundo en 1934, 1938 y llevándose el oro en los JJ.OO. de Berlín en 1936.

A pesar de todo ello, Mussolini supo aprovechar los deportes de masas como el fútbol, por ejemplo, para conseguir sacar provecho político a nivel internacional, ya que era un deporte que gustaba más y era internacional.

De igual forma que hicieran, o han hecho, la mayoría de los movimientos revolucionarios-autoritarios, el Fascismo quiso influir en el conjunto de la sociedad, por lo tanto, el deporte era algo muy importante donde además se podía tener notoriedad, lo que los autores llaman la fascistización del deporte. Recordemos, pues, que por esta época el deporte representaba a las naciones y era una forma de influir internacionalmente, de tener prestigio y ligarlo a la ideología del movimiento.

La Volata fue un vago intento del Fascismo por intentar implementar un deporte del régimen que representara los valores fascistas y a Italia, pero su poca acogida favoreció su fracaso, a pesar de los intentos de las organizaciones por revitalizarlo. Sin embargo, la imagen del régimen fascista se pudo ver notoriamente en los mundiales de futbol y en los JJ.OO. donde Italia ganó.

 

Por Álvaro González

 

Bibliografía

 

ORELIA, JOSE L., Historia del Fascismo, Sekoitia, 2023

https://www.eurasia1945.com/acontecimientos/fascismo/el-deporte/

https://es.thefreedictionary.com/volata

https://www.epe.es/es/deportes/20211207/mussolini-ceaucescu-rugby-modelo-propaganda-12925504

https://www.studocu.com/es/document/universidad-europea-de-madrid/teoria-e-historia-de-la-actividad-fisica-y-del-deporte/cult-fisica-xx-deporte-totalitarismos/81809938

 

 

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